sábado, 4 de noviembre de 2006

EL FIN DE ESPAÑA

El largo proceso de la transición (1975-1982) no sólo sirvió para acabar con la dictadura y 40 años de censura y falta de libertades, sino que también sirvió para unir definitivamente a las "dos españas", rojos y nacionales, derecha e izquierda, católicos y no católicos, hombres y mujeres, militares y civiles... y forjar una sociedad libre y en paz.

El atentado del 11 de marzo de 2004, y sobre todo lo que ocurrió en España entre el 11 y el 14 de marzo, sirvió para quebrar de nuevo España en las dos realidades diametralmente opuestas e irreconciliables que parecían olvidadas y enterradas.

El PSOE, radicalizado, se alzó con la victoria electoral el 14 de marzo de 2004 gracias a la campaña de manipulación, acoso y derribo contra el PP liderada por miembros del PSOE, sus aliados y el grupo Prisa. El PSOE tuvo la indecencia de ridiculizar a 192 muertos y 1500 heridos usando un hecho tan trágico, una masacre, para su propio beneficio electoral. Con ello tendrán que cargar para siempre.

La vuelta del PSOE al poder, ha traído de nuevo a nuestras vidas la crispación, la radicalidad, la corrupción y la ruptura. El PSOE se ha eregido como el heredero directo del fascismo más repugnante y vil.

La manipulación de la radiotelevisión pública, la persecución a los católicos, la destrucción de la familia, la dinamitación del Estado de Derecho, la irresponsabilidad política, el aislamiento internacional, la censura pública y el insulto descarado, la manipulación de la historia, el sectarismo educativo, la despreocupación por los problemas reales de los españoles, el desprecio a las víctimas del terrorismo, las concesiones a dedo, la opulencia desproporcionada, el ocultismo, el intervencionismo del Estado en la economía y en la empresa privada, la persecución a los medios de comunicación críticos, la marginación del castellano como única lengua oficial, el resurgimiento del eje del mal y ante todo la inminente ruptura de España son algunos de los logros más brillantes del gobierno socialista.

Quizá no hemos asistido al renacer de las "dos españas", sino al empezose del se acabose. Al principio del fin de España como nación única, como institución, como cultura, como patria y como sentimiento. El fin de la España de las tradiciones, la España del bienestar, la España de la democracia y de las libertades. El triunfo del nacionalismo destructor, egoísta, chantajista y despreciable. El resurgimiento de las dos, de las tres o de las veinte españas. El resurgimiento de los reinos de Taifas. ¿La España Federal que promulga Cebrián? El fin de nuestra España. ¿Qué quedará de España? Ex-paña...