Si hay que inventar, se inventa
Me paseaba hace un rato por la blogosfera Anti-ZP, cuando el título de un post me llamó la atención : "Las células-madre fetales producen tumores". Ya el título me pareció algo provocador, quizá rocambolesco, así que decidí adentrarme en el contenido del artículo del compañero Miguel Ángel Amela. Siento decir que lo que leí me pareció endeble, falto de coherencia y sensacionalista. Aquí os enlazo el artículo.
Me gustaría destacar únicamente algunas frases de su escrito. Y vaya por delante que yo soy un hombre de ciencia y que no me considero precisamente progre.
1. Lograr un fin maravilloso como pudiera ser la curación del cáncer o del SIDA o de lo que sea, no parece razón suficiente para pasar por encima de personas concretas, aunque su tamaño sea minúsculo. Querido Miguel. No se pueden meter en el mismo saco todas las enfermedades a la hora de hablar de células madre. Hasta donde yo sé no hay ningún estudio en que se haya intentado curar la infección VIH a través de las células madre ni nada por el estilo. Las investigaciones actuales están tratando de promocionar los inhibidores de la fusión y siguen trabajando en los inhibidores de la integrasa.
Y un pequeño apunte. Es evidente que sería largo de discutir el fondo de lo que planteas. Pero también es verdad que la Iglesia trata de alentar a los que sufren y los papas siempre han pedido por el fin del sufrimiento. Si los hombres de ciencia podemos tratar de paliar ese sufrimiento bienvenido sea. Aunque es evidente que no todo vale.
2. Son muchos científicos los que han tenido que sufrir la persecución por afirmar que el camino que debe seguir la ciencia en la investigación de células madre pasaría por las adultas (del propio tejido o de cordón umbilical por ejemplo) en lugar de emplear las de embriones. No conozco quienes son tales científicos, porque hay mucho sensacionalismo en la prensa, pero no dudo que existan. Ahora bien, hay que cuidar el concepto de célula madre adulta.
Una célula madre, pluripotencial, totipotente o steam cell, es una célula que con los estímulos correspondientes puede diferenciarse hacia un determinado tipo de tejido, o sea, que una célula madre podrá ser un hepatocito o un miocito dependiendo de las señales que le lleguen.
Las células madre adultas son aquellas que están en los tejidos humanos de cualquier persona y que tienen como función regenerar un determinado tejido cuando este es agredido o destruído. Lo único que diferencia a las células madre de un embrión de las del cordón umbilical es su localización, y por ende sus connotaciones éticas.
Yo no entro en el debate de las células madre, simplemente creo que es imprescindible no vender humo ni en uno ni en otro sentido. Ni Bernat Soria ha descubierto nada con diez años y decenas de millones en la investigación con las células madre, ni se puede descartar la utilidad de las células madre, ni se deben confundir los términos científicos.
3. De las investigaciones con células madre embrionarias no se conoce ningún éxito, pero sí en las de propio tejido o en las de cordón umbilical (incluso han surgido bancos públicos y privados para la gestión de esto). No tiene nada que ver compañero. Lo que se está investigando adecuadamente son las señales que intervienen en la diferenciación de las células madre en uno u otro sentido. Tan útiles serían las procedentes de un sitio como las procedentes de otro. Lo que suscita el debate, el núcleo de la confrontación, es la idoneidad o la rectitud ética que supone el uso de embriones para fines científicos.
4. Y por último, querido Miguel. No se puede titular un artículo de la forma en que lo has hecho, porque lo que se interpreta de ello está muy claro: no se deben usar células madre fetales porque producen tumores. Y eso es una barbaridad en todos los sentidos, es puro amarillismo. Por esa regla de tres las personas afectas de un teratoma o de un tumor germinal, consecuencia de la mala migración de las células embrionarias, son alienígenas, extraterrestres y progres. No es así.
Cualquier célula, por el hecho de serlo, puede potencialmente adquirir las características de una célula tumoral: inmortalidad, no inhibición con las células vecinas, crecimiento incontrolado... En el caso que nos ocupa las células madre pueden derivar a células tumorales. Pero eso es independiente de su origen. Por tanto el titular es, cuanto menos, inexacto.
Hay que ser muy cuidadoso al tratar según que temas, máxime cuando se escribe en un foro abierto donde muchas personas pueden leerlo y hacer uso de esa información. Hay que limitar la ciencia, hay que acotar la investigación... pero hay que tener claros los conceptos y las cartas con las que se juega la partida.
Me paseaba hace un rato por la blogosfera Anti-ZP, cuando el título de un post me llamó la atención : "Las células-madre fetales producen tumores". Ya el título me pareció algo provocador, quizá rocambolesco, así que decidí adentrarme en el contenido del artículo del compañero Miguel Ángel Amela. Siento decir que lo que leí me pareció endeble, falto de coherencia y sensacionalista. Aquí os enlazo el artículo.
Me gustaría destacar únicamente algunas frases de su escrito. Y vaya por delante que yo soy un hombre de ciencia y que no me considero precisamente progre.
1. Lograr un fin maravilloso como pudiera ser la curación del cáncer o del SIDA o de lo que sea, no parece razón suficiente para pasar por encima de personas concretas, aunque su tamaño sea minúsculo. Querido Miguel. No se pueden meter en el mismo saco todas las enfermedades a la hora de hablar de células madre. Hasta donde yo sé no hay ningún estudio en que se haya intentado curar la infección VIH a través de las células madre ni nada por el estilo. Las investigaciones actuales están tratando de promocionar los inhibidores de la fusión y siguen trabajando en los inhibidores de la integrasa.
Y un pequeño apunte. Es evidente que sería largo de discutir el fondo de lo que planteas. Pero también es verdad que la Iglesia trata de alentar a los que sufren y los papas siempre han pedido por el fin del sufrimiento. Si los hombres de ciencia podemos tratar de paliar ese sufrimiento bienvenido sea. Aunque es evidente que no todo vale.
2. Son muchos científicos los que han tenido que sufrir la persecución por afirmar que el camino que debe seguir la ciencia en la investigación de células madre pasaría por las adultas (del propio tejido o de cordón umbilical por ejemplo) en lugar de emplear las de embriones. No conozco quienes son tales científicos, porque hay mucho sensacionalismo en la prensa, pero no dudo que existan. Ahora bien, hay que cuidar el concepto de célula madre adulta.
Una célula madre, pluripotencial, totipotente o steam cell, es una célula que con los estímulos correspondientes puede diferenciarse hacia un determinado tipo de tejido, o sea, que una célula madre podrá ser un hepatocito o un miocito dependiendo de las señales que le lleguen.
Las células madre adultas son aquellas que están en los tejidos humanos de cualquier persona y que tienen como función regenerar un determinado tejido cuando este es agredido o destruído. Lo único que diferencia a las células madre de un embrión de las del cordón umbilical es su localización, y por ende sus connotaciones éticas.
Yo no entro en el debate de las células madre, simplemente creo que es imprescindible no vender humo ni en uno ni en otro sentido. Ni Bernat Soria ha descubierto nada con diez años y decenas de millones en la investigación con las células madre, ni se puede descartar la utilidad de las células madre, ni se deben confundir los términos científicos.
3. De las investigaciones con células madre embrionarias no se conoce ningún éxito, pero sí en las de propio tejido o en las de cordón umbilical (incluso han surgido bancos públicos y privados para la gestión de esto). No tiene nada que ver compañero. Lo que se está investigando adecuadamente son las señales que intervienen en la diferenciación de las células madre en uno u otro sentido. Tan útiles serían las procedentes de un sitio como las procedentes de otro. Lo que suscita el debate, el núcleo de la confrontación, es la idoneidad o la rectitud ética que supone el uso de embriones para fines científicos.
4. Y por último, querido Miguel. No se puede titular un artículo de la forma en que lo has hecho, porque lo que se interpreta de ello está muy claro: no se deben usar células madre fetales porque producen tumores. Y eso es una barbaridad en todos los sentidos, es puro amarillismo. Por esa regla de tres las personas afectas de un teratoma o de un tumor germinal, consecuencia de la mala migración de las células embrionarias, son alienígenas, extraterrestres y progres. No es así.
Cualquier célula, por el hecho de serlo, puede potencialmente adquirir las características de una célula tumoral: inmortalidad, no inhibición con las células vecinas, crecimiento incontrolado... En el caso que nos ocupa las células madre pueden derivar a células tumorales. Pero eso es independiente de su origen. Por tanto el titular es, cuanto menos, inexacto.
Hay que ser muy cuidadoso al tratar según que temas, máxime cuando se escribe en un foro abierto donde muchas personas pueden leerlo y hacer uso de esa información. Hay que limitar la ciencia, hay que acotar la investigación... pero hay que tener claros los conceptos y las cartas con las que se juega la partida.
6 comentarios:
Está bien tener en la blogosfera un médico para informar a la gente de los errores que cometen algunas publicaciones. Algún día te haré alguna pregunta relacionada con tu campo profesional.
Pregunta, pregunta. Lo bueno de la blogosfera es que siempre hay gente que sabe de los temas que tratamos, y eso sirve para aprender.
Saludos
Vaya, ¿abre consultorio profesional? Porque no me importaría hacerle un par de cuestiones.
¿Aún a la espera de plaza?
OFF TOPPIC: Tienes un premio en mi blog
http://libertadantipsoe.blogspot.com/2009/03/recibo-el-premio-apache-2009.html
Hola Alberto,
por alusiones...
1. Lo primero, la aceptación de la corrección. No soy médico, aunque he intentado leer e informarme lo que he podido.
2. Tú mismo aceptas que no todo vale. Hace poco la prensa ya afirmaba (pocos medios se hacían eco) que unos ratones tratados con células embrionarias habían producido tumores.
3. No pretendo decir que no valen las células madre: las adultas (quizá lo expliqué mal) son moralmente válidas ya que no es necesaria la destrucción de un ser humano para lograrlas. Eso desde el punto de vista moral, que es el que me preocupaba.
4. Con respecto al título... quizá no es el más adecuado, pero el de 'si hay que inventar, se inventa' tampoco es muy correcto. Quizá tenga incorrecciones, pero no se trata de inventar. Lo que pretendía era remarcar cómo muchas veces la ciencia acude en socorro de la fe y la moral. El ejemplo del SIDA era referido al hecho (y creo que en el post lo digo) de que no todo vale, de que incluso la curación de pandemias tendría límites para no justificar el genocidio.
Creo que en el fondo estamos de acuerdo: debe haber límites a la ciencia, que no todo vale. Como ya te indico, no soy médico, ni pretendo hacer juicios de valor médicos. Soy periodista y como decíamos en la Facultad, 'un océano de sabiduría con un dedo de profundidad'. A veces eso produce errores (lo vemos a diario), pero a veces también los científicos (no es tu caso) liais la cosa para que parezca que algo está próximo cuando... no es nada (Soria es un ejemplo).
En fin, que reitero mi agradecimiento por la corrección, y espero que se entienda el sentido del post.
Un saludo muy cordial
Muchas gracias por tu comentario Miguel. Discrepar y aprender unos de otros siempre es positivo.
Saludos
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